Escrito por Luciana Gutsztat
Hace unas semanas los diarios publicaban las noticias sobre el Foro Económico Mundial 2020 y las principales definiciones sobre el futuro del trabajo. Un detalle que llamaba la atención eran las posiciones de los profesionales inscriptos como asistentes a la emblemática cumbre de Davos.
La lista incluía: Chief Inclusion Officer, Chief Sustainability Officer, Head of Social Impact, Head of Cultural Insights, Head of Workforce of the Future, Chief Diversity and Inclusion Officer y otras posiciones más ligadas a temas como diversidad, medio ambiente, género, cultura, transformación digital y employee experience.
Si bien hace años que las empresas integran criterios ambientales y sociales en procesos, productos y servicios, las poblaciones del mundo demandan a las organizaciones definiciones precisas y un rol más activo en el abordaje de las problemáticas medioambientales, de género, inclusión digital, etc. Es evidente que estos roles tan novedosos estaban pensados para afrontar esta agenda desde el interior de las organizaciones.
Dos meses después de la Cumbre, la irrupción del coronavirus transformó el mundo laboral para siempre. ¡El futuro del trabajo llegó antes de lo que esperábamos! y las temáticas de employee experience, cultura y transformación digital que en Davos 2020 aparecían ligadas al futuro del trabajo, hoy resultan más actuales, urgentes y relevantes que nunca.
Para las empresas, la crisis representa una oportunidad para ver dónde están paradas y determinar hacia dónde quieren ir. Este podría ser el momento ideal para repensar los valores y la forma en que se relacionan con la sociedad de cara al futuro.
Aunque no existe un plan que se ajuste a todas las organizaciones – por definición la transformación cultural es un proceso de intervención sobre aspectos identitarios y particulares de cada organización – aquí presentamos una serie de pequeñas iniciativas que implementadas de manera orgánica y progresiva pueden ayudar a las empresas a dar respuestas a las necesidades colectivas y a cómo prepararnos para el futuro del trabajo.
Anímate a pensar el futuro del trabajo con nuevos valores
La crisis del coronavirus inaugura un nuevo orden mundial y obliga a las organizaciones a revisar su posicionamiento frente a la sociedad. Los valores deben revisarse y adaptarse a los trabajos del futuro. Algunos ejemplos: Globant recientemente incorporó el valor BeKind como una invitación a sus colaboradores a transformar las organizaciones y la vida de las personas a través del cuidado de sus colegas, del planeta y de la humanidad. A nivel Global, CEPSA, por su parte, sumó el valor “Sustentabilidad”, Disney cuenta con “Inclusive & welcoming” y KPMG tiene “comunidad”.
Revisar los valores enunciados por la compañía y crear nuevos vinculados con los desafíos sociales es una excelente manera de decir: “este tema es importante, vamos a valorizarlo”.
Es importante tener en cuenta que crear un valor y no ponerlo en práctica, no tendrá casi ningún impacto real en la empresa. La cultura de una organización es mucho más que un listado estático de conceptos expresados en su ideario, es más bien entender cómo esos valores se viven y transmiten a diario.
Sugerimos desarrollar una estrategia para que esos valores se conviertan en comportamientos cotidianos con los que las personas se sientan realmente identificadas.
Utiliza los líderes informales a tu favor
Como vimos en el listado de los participantes de Davos, algunas compañías están creando “empleos del futuro” para liderar internamente estas temáticas. ¿Te gustaría fomentar esta agenda en tu compañía pero no estás en condiciones de crear puestos específicos para esto? Existe una manera que podría llegar a ser tan poderosa como crear posiciones formales.
Por su naturaleza, las temáticas sociales no deberían abordarse solamente desde la lógica de las estructuras jerárquicas, sino desde una aproximación más holística y colaborativa, que fomente la participación espontánea. ¿Quiénes son los mejores candidatos para impulsar esto? Los líderes informales, que emergen orgánicamente en las organizaciones y tienen la capacidad de influenciar a los colaboradores.
Los especialistas en futuro del trabajo proponen fomentar líderes informales para motivar la construcción de liderazgos orgánicos, flexibles y transparentes que ayuden a impulsar iniciativas desde “abajo”. Utiliza tecnología para encontrar a los influenciadores de tu organización y bríndales el respaldo necesario para que puedan liderar las iniciativas sociales de tu organización.
Construye una comunicación co-creada
La comunicación es como la cultura, si bien existe el “área de comunicación” esta debe ser implementada por todas las personas todos los días.
Hace años que las empresas adoptaron canales bidireccionales de comunicación con el fin de brindar a sus colaboradores un espacio para expresarse y generar un diálogo horizontal.
Con la llegada de las redes sociales corporativas esa posibilidad se potenció aún más: ahora los canales son multidireccionales y todos podemos ser comunicadores de mensajes.
Estimula a que tus colaboradores puedan generar sus propias comunidades de intereses. Pon a disposición espacios digitales para que dialoguen, se organicen en comités y se hagan “dueños” de las iniciativas sociales. Por ejemplo: puede ser una comunidad de mujeres, de medio ambiente o de apoyo a poblaciones vulnerables. De esta manera podrán canalizar sus inquietudes sociales en el marco de la empresa pero con un compromiso genuino ya que surgiría de ellos mismos.
Nunca te olvides de medir
Tanto los nuevos modelos de liderazgos como las iniciativas sociales que desarrollan en la empresa deben poder medirse. ¿Qué significa esto? Que es imprescindible obtener datos de cómo los colaboradores se están sintiendo, relacionando y comprometiendo (o no) para tomar decisiones más acertadas.
Hoy existen tecnologías accesibles basadas en people analytics para medir la efectividad de las diferentes iniciativas y monitorear cómo la adopción de tus valores evoluciona en el tiempo.
Para garantizar la continuidad del negocio durante la pandemia muchas empresas han invertido en softwares para poder trabajar a distancia. Si todavía no las tienes, este podría ser el momento ideal para adoptar herramientas de análisis de datos que midan la transformación cultural de tu compañía.
No sabemos a ciencia cierta cuál es el futuro del trabajo. El mundo está atravesando cambios profundos y a una velocidad extraordinaria. Para muchas compañías podría ser el punto de partida para cambiar de cara a un nuevo escenario laboral. No hay dudas de que en el trabajo del futuro la tecnología va a jugar un rol fundamental para construir organizaciones centradas en las personas, en las que la empresa y los colaboradores comparten sus intereses por hacer de este mundo un lugar mejor.
